Servicio de traducciones farmacéuticas

¿Necesitas traducir un texto farmacéutico o buscas una agencia especializada en traducción farmacéutica con más de dos décadas de experiencia en el sector? 

Traducción farmacéutica

En el departamento de traducciones farmacéuticas de la agencia de traducción LinguaVox podemos ayudarte. Confía en nuestros traductores farmacéuticos y en nuestro sistema de calidad doblemente certificado (ISO 9001 e ISO 17100) y obtendrás una traducción de calidad de todo tipo de documentos farmacéuticos.

Al igual que ocurre con la traducción científica y la traducción médica, la traducción farmacéutica también es conocida por la particularidad y exigencia de su vocabulario, aunque en esta especialidad encontramos un tipo de trabajo mucho más exigente y difícil.

Una labor con pocos profesionales, pero muy especializados. Un servicio con unas altas exigencias, que requiere tanto el dominio de los idiomas como del sector farmacéutico, donde los estándares de precisión, rigor y calidad son imprescindibles. ¿Quieres conocer más sobre estas traducciones? Sigue leyendo.

Una traducción farmacéutica es la adaptación de cualquier documento o texto de carácter farmacéutico de un idioma a otro. Se caracteriza por exigir el conocimiento y dominio de un vocabulario tan específico como es el del sector de las farmacias, además de por combinar también la necesidad de conocer léxico de otras ciencias como la jurídica, la informática y un largo etcétera.

Por lo general, las traducciones farmacéuticas necesitan de la labor de un buen traductor, pero también de la participación de personas especializadas en el sector. Es ideal que el traductor encargado domine términos y conceptos sobre el sector farmacéutico, además de los dos idiomas con los que trabajar para llevar a cabo la traducción.

Aunque es muy similar a las traducciones médicas, las farmacéuticas tienen como particularidad esa aglomeración de ciencias, amén de adentrarse mucho más en los estudios de medicamentos.

La formación necesaria para un traductor farmacéutico parte de la total necesidad de dominar dos idiomas. Por una parte, el nativo del profesional y, por otra, la lengua desde la que se traduce. Como en otros sectores científicos, el inglés es el idioma predominante. De ahí que la mayor demanda de traducciones farmacéuticas se concentre en el par lingüístico inglés-español.

Los expertos en este campo deben dominar los conceptos principales de la farmacología, así como entender y saber reconocer las partes fundamentales del prospecto de cualquier medicamento, por no mencionar el dominio de los términos clave de este documento.

Asimismo, hay que añadir también la capacidad para distinguir conceptos clave sobre campos como la farmacodinámica y la farmacocinética, dos de los grandes pilares de la farmacología. Por último, pero no por ello menos importante, mencionar la necesidad de saber cómo se menciona a los fármacos en cualquier texto médico extranjero, conocer sus nombres y saber identificarlos, además de adaptarlos adecuadamente.

Son muchos los textos de carácter farmacéutico que requieren de la participación de profesionales en la traducción dentro de este ámbito. No obstante, si nos ceñimos a los más comunes, a los que cuentan con una mayor presencia entre las peticiones a los traductores farmacéuticos profesionales, estos son los más habituales:

  • Manuales de instrumental médico.
  • Prospectos farmacéuticos.
  • Fichas técnicas de medicamentos.
  • Certificados médicos como pruebas, análisis, etc.
  • Publicidad de productos de farmacia.
  • Artículos especializados de revistas del sector.
  • Sitios web de empresas farmacéuticas.

Es en cualquiera de estos textos donde se vuelve fundamental contactar con un experto no solo en traducción, sino también en farmacología, para poder contar con un trabajo de calidad. Y es que estas traducciones exigen una gran precisión y calidad.

Como mencionábamos antes, la calidad y la precisión en las traducciones farmacéuticas son esenciales. Para empezar porque, si nos ceñimos a los prospectos, sin ir más lejos, nos encontramos con todo un organismo, el Comité de Medicamentos de Uso Humano, especializado en comprobar la información que se muestra en ellos.

Deben cumplir unos estándares de calidad, información, detalles y legibilidad para ser fáciles de entender por profesionales y por consumidores. Y eso es algo que requiere de una labor de traducción impecable.

Más allá de eso, la rapidez con la que trabaja el sector farmacéutico obliga a una rápida introducción de medicamentos en el mercado, obligando a que los profesionales de la traducción respondan no solo con una precisión milimétrica, sino también con la mayor rapidez posible para poder facilitar esa extensión a los diferentes mercados.

Una mala traducción en un texto farmacéutico puede llevar a una ingesta inadecuada de un medicamento y a la aparición de efectos adversos, o incluso al mal empleo de instrumental médico. Esto demuestra la importancia de la exactitud y la calidad en este sector.