Lo primero que se suele abordar es la corrección gramatical en inglés. Una lectura detallada del texto permitirá al especialista detectar posibles errores en el uso de conectores, de los signos de puntuación o en la estructura de las oraciones, entre otras cosas.
La corrección gramatical es una de las revisiones esenciales que deben hacerse en un texto, ya que garantiza que el resultado final será entendido claramente por parte de los destinatarios del texto.
Otra parte importante de la corrección de textos en inglés es la corrección ortográfica. Por muy bien que el autor maneje la lengua inglesa, siempre puede aparecer en el texto algún error u omisión que puede hacer que el significado de la palabra cambie o, sencillamente, que el escrito transmita la sensación de que no se ha cuidado lo suficiente su redacción.
Esta revisión repasa cada una de las palabras que aparecen en el texto y se asegura de que estén bien escritas. Si no es así, se practican los ajustes que sean necesarios.
La corrección ortográfica en inglés da lugar a un texto más depurado y fácil de leer y comprender. Pero no es esta la última labor de revisión que se lleva a cabo sobre el escrito, porque, tras la corrección de errores en inglés, llega la fase de corrección de estilo.
En esta se termina de perfilar el escrito para que quede perfecto. Se adapta el tono y la voz para que haya homogeneidad, y se hacen ajustes que lo doten de más claridad y fluidez.
Tras todo este proceso, el resultado es un texto que se ajusta al nivel de comprensión del lector y resulta atractivo e interesante para él.